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Cuando tienes que escuchar a veces que “es mejor una episiotomía bien hecha a tiempo” en un foro de profesionales aludiendo a la falta de pericia en materia de protección perineal por parte de la persona que atiende el expulsivo, simplemente la cabeza te empieza a dar vueltas. Y eso es lo que nos ha pasado recientemente. En estos casos, hay que buscar lo que dice la evidencia científica actual y seguir por esa línea.
La episiotomía es un corte de la vagina y del periné que se realiza justo cuando está a punto de salir la cabeza del bebé, y que requiere, evidentemente, puntos de sutura por parte del profesional.
El uso de la episiotomía sistemática era una práctica que se llevaba a cabo hasta hace bien poco en la atención al parto, pero hoy en día ¿en qué situaciones se recomienda realizar una episiotomía?
·Parto instrumental: sobre todo en partos con fórceps o espátulas, para evitar daños mayores.
·Presentaciones de nalgas o partos múltiples.
·Riesgo de pérdida de bienestar fetal (cuando necesitamos una salida del feto rápida porque sospechamos que puede estar comprometido su aporte de oxígeno)
Por lo tanto, las situaciones en las que podría ser útil su uso están tremendamente limitadas.
Si el argumento de la realización de la episiotomía es “para proteger el periné y evitar desgarros mayores”, son muchos los estudios que nos dicen todo lo contrario: existe un mayor riesgo de traumatismo perineal/vaginal grave cuando se realiza la episiotomía (1).
En cuanto a la protección perineal en el momento del expulsivo para reducir los daños en el periné, estamos totalmente de acuerdo con que los profesionales deben conocer y entrenarse en las diferentes técnicas que presentan mayor evidencia de reducir los daños perineales graves, como son (2):
·El masaje de la zona perineal
·La aplicación de compresas calientes en el momento del expulsivo
Otras maniobras están aún en estudio para conocer si serían beneficiosas para evitar problemas en el periné como son la maniobra de Ritgen y el “hands-off”, entre otros.
Y llegados a este punto, os preguntaréis ¿qué puedo hacer yo como embarazada para intentar tener el mínimo daño posible en mi periné?
·El masaje digital perineal durante el último mes de embarazo (1 o 2 veces/semana desde la semana 35) parece que facilita la expansión de los tejidos perineales mejor y disminuye la probabilidad de tener un trauma perineal, así como dolor perineal después (3).
·La actividad física durante el embarazo que mejore la elasticidad de tus tejidos está recomendada.
·Una correcta alimentación e hidratación que incluya una adecuada cantidad de proteínas, vitamina E, ácidos grasos Omega 3 y 6, vitamina C y bioflavonoides. ¿Cómo consigues todo esto? Aumentando tu ingesta de frutas y verduras, legumbres, frutos secos, pescado como el salmón y aceite de oliva.
·La respiración durante el parto mejora la oxigenación de los tejidos y te permite conectar con tu zona perineal para llevar a cabo unos pujos eficaces.
Fuente:
1. Jiang H, Qian X, Carroli G, Garner P. Uso de la episiotomía selectiva versus sistemática para el parto vaginal. Cochrane Database of Systematic Reviews 2017 Issue 2. Art. No.: CD000081. DOI: 10.1002/14651858.CD000081 http://www.bibliotecacochrane.com/BCPGetDocument.asp?SessionID=%2012674177&DocumentID=CD000081
2. Aasheim V, Nilsen ABV, Reinar LM, Lukasse M. Perineal techniques during the second stage of labour for reducing perineal trauma. Cochrane Database of Systematic Reviews 2017, Issue 6. Art. No.: CD006672. DOI: 10.1002/14651858.CD006672.pub3.
3. Beckmann MM, Stock OM. Antenatal perineal massage for reducing perineal trauma. Cochrane Database of Systematic Reviews 2013, Issue 4. Art. No.: CD005123. DOI: 10.1002/14651858.CD005123.pub3.
http://www.cochrane.org/CD005123/PREG_antenatal-perineal-massage-for-reducing-perineal-trauma