Por Mónica Blas Robledo
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4 de noviembre de 2023
Ya desde hace un tiempo conocíamos la existencia de ciertos productos lubricantes que ayudaban a las mujeres en menopausia en sus relaciones sexuales y que estaban siendo recomendados por las matronas de forma individualizada cuando acudían las mujeres a consulta a realizar la citología, o con problemas de falta de lubricación o dolor en las relaciones. Pero existen muchas mujeres que presentan molestias en sus genitales por sequedad o escozor , tanto dentro como fuera, de forma continua, entones, ¿cómo podemos prevenir o incluso tratar estas molestias? 1. Alimentación: es importante estar bien hidratada, así que debemos beber agua o líquidos en cantidad suficiente. Comer abundantes alimentos ricos en agua como frutas, verduras, sopas, cremas, etc. Los ácidos grasos omega 3 y 6 te ayudarán a mantener la hidratación en tus mucosas, los frutos secos (nueces, pipas de girasol, almendras, etc.) y los pescados azules (caballa, sardinas, anchoas) no pueden faltar en tu dieta. Los alimentos ricos en ácidos grasos omega 7 pueden ser útiles para aliviar la sequedad. Algunos alimentos accesibles ricos en omega 7 son aguacates, huevos, aceite de oliva, lácteos sin desnatar (queso, mantequilla), etc. 2. Higiene de esta zona: adecuada, ¿qué quiere decir? Una vez al día, suficiente. Lavar demasiado la zona genital externa puede llevar a aumentar la sequedad, el escozor y la irritación. La vagina (la parte interna de nuestros genitales) no necesita ninguna limpieza, tiene su propio “autolavado”. ¡Ojo con los productos que utilizamos en la higiene! Debemos utilizar productos específicos para la zona íntima tanto en la limpieza como en su hidratación. La ropa interior a veces, puede ser irritante por las fibras o materiales de las que se forma y nos puede resultar muy bonita y sexy, pero de manera habitual es mejor usar ropa interior de algodón blanca y lavada con jabón hipoalergénico. Las compresas y salvaslip pueden tener componentes irritantes también. Si utilizamos óvulos lubricantes o productos aplicados internamente o bien tenemos escapes de orina, y necesitamos utilizar algún tipo de protector para no manchar la ropa interior, debemos elegir el que mejor se adapte a las necesidades de nuestra piel de la zona perineal y seguir las instrucciones en cuanto a la frecuencia de cambio de la compresa. 3. Autoconocimiento: la estimulación hace que llegue más sangre a la zona genital, más sensaciones nerviosas y hace que las mucosas estén más hidratadas y fuertes. ¿Esto qué quiere decir? Que nos conviene la estimulación con regularidad, bien con otra persona o bien con nosotras mismas. Existen muchos dispositivos (estimuladores, vibradores, etc.) en el mercado, así que podemos ser autosuficientes y ofrecernos la estimulación cuando más nos apetezca y de la forma que más nos guste. 4. Hidratación: si has llegado has aquí, y has ido poniendo en práctica todos los consejos anteriores, quizás ya no necesites utilizar ningún producto para mejorar la hidratación de la vulva y zona perineal. Si, por el contrario, sigues notando sequedad, escozor o tirantez en la zona íntima, te proponemos una rutina de “cuidado genital”: • Primer paso: limpiar con un producto específico para la zona genital externa rico en activos calmantes de origen natural. • Segundo paso: aplicar un hidratante para la zona intima externa o aceite específico que nos aporte acido hialurónico o rosa mosqueta, para poder regenerar la piel irritada. • Tercer paso: hidratar la vagina internamente, según las necesidades puede ser suficiente con una crema o la aplicación de unos óvulos, también ricos en ácido hialurónico y aceites. El cuidado de la salud de la mujer es un tema apasionante, seguimos actualizándonos con los avances que nos ofrece también la tecnología. La utilización del láser ginecológico es una de las técnicas que está llegando con fuerza para el tratamiento y el alivio de la sequedad vaginal y la lubricación, pronto os contaremos más sobre este tema.